jueves, 28 de agosto de 2014

Mostrar que es posible.


“La desgracia de los hombres es peculiar: sólo con gran dificultad consienten vivir de la Verdad para la que fueron hechos. Si queréis cumplir dignamente con vuestro papel, que es el comienzo de vuestro papel de hombres, es necesario que tengáis coraje. A menudo os preguntáis en qué consiste la acción que se ejerce sobre las almas y tenéis dificultad para concebirla. Esa acción no consiste en otra cosa que en introducir a los hombres en la Verdad. Si no es eso, no es nada. ¿Y cómo lograrlo? Si los demás ven que vosotros mismos vivís de la Verdad sin debilidad alguna, cumpliendo así vuestra función que es la de ser testigos, ellos habrán recibido lo que esperaban de vosotros y lo que vosotros les debéis: tienen necesidad de que se les ayude a ser; necesitan que se les muestre que es posible hacer entrar la Verdad en su vida de un modo tal que nunca jamás salga ya de ella”.

André Charlier
, Lettres aux capitaines. Traducción: El Brigante, 17-Jun-2009.

Fulton J. Sheen: La Virgen de la Esperanza.


Nuestro mundo moderno se caracteriza por designios profundos.
Advertimos en nosotros miedo y ansiedades.
Los hombres de otros tiempos temían a Dios, pero era un temor distinto al que hoy sentimos; antes se preocupaban de no ofender a Dios porque le amaban. Luego vinieron las guerras mundiales, que infundieron en los hombres un terror irrechazable de unos a otros.
Hoy todos nos sentimos humillados y amedrentados, ante el elemento más pequeño del universo: ¡el átomo!
El mal de un individuo quedó convertido en el mal de toda la humanidad a partir del día en que se arrojó la primera bomba atómica. Desde entonces, la muerte es la pesadilla de la sociedad y de la civilización, y, de esta forma, la Religión se ha convertido, aun por razones políticas, en la base de la vida humana.
En la antigüedad, los babilonios, griegos y romanos se batieron en nombre de sus propias divinidades. Más tarde, el Islamismo oprimió al mundo cristiano, dejando reducidos los 750 Obispos que había en África en el siglo VII a los cinco del siglo XI. Pero el Islamismo no combatió a Dios, sino que solamente luchó contra los que creían en el Dios que se había revelado en Jesús. La diferencia de las teorías consistía en la elección de los medios para llegar a Dios, considerado por unos y por otros como el fin de la vida.
Ahora todo ha cambiado.
Ya no hay guerras de religión. Existe la lucha desencadenada contra toda fuerza, contra toda idea religiosa.
El comunismo no niega a Dios con la misma apatía que lo hace un estudiante de Bachillerato; el comunismo quiere destruir la idea de Dios; no sólo niega su existencia, sino que pervierte el concepto. A Dios quiere sustituirlo con el hombre dictador y dueño del mundo.
Hoy nos vemos forzados a escoger entre Dios y sus enemigos, y entre Democracia y Fe en Dios, y el ateísmo y la dictadura.
La preservación de la civilización y de la cultura está íntimamente ligada a la defensa de la religión. Si los enemigos de Dios fuesen a prevalecer, habría que rehacerlo todo.
Pero en el mundo moderno hay una tercera característica: la tendencia a perderse en la naturaleza.
El hombre debe mantener dos contactos estrechos para ser feliz: Uno vertical, con Dios; el otro, horizontal, con su prójimo.
En la actualidad, el hombre ha interrumpido las relaciones con Dios por medio de la indiferencia y de la apatía religiosa y ha hecho pedazos las relaciones sociales, con la guerra. Y como quiera, que sin felicidad no se puede vivir, ha tratado de compensar los contactos perdidos con una tercera dimensión de profundidad con la que espera anularse en la naturaleza. El que antes se ufanaba de estar hecho a imagen y semejanza de Dios, comenzó a jactarse de ser el creador de sí mismo y de haber hecho finalmente a Dios a su imagen y semejanza.
Con este falso humanismo empezó la bajada de lo humano a lo animal.
El hombre admitió que descendía de las bestias, apresurándose a confirmarlo en enseguida con una guerra bestial.
Más recientemente aún, el hombre se ha identificado por completo con la naturaleza afirmando que no es sino una compleja composición química.
Hace mucho se ha denominado “el hombre atómico”. De esta forma, la Teología se ha reducido a Psicología, la Psicología a Biología y ésta a Física. Ahora podemos comprender mejor lo dicho por Cournot, que en el siglo XX Dios dejaría a los hombres en poder de las leyes mecánicas, de las que Él mismo era autor.
Permitid que me explique:
La bomba atómica actúa sobre la humanidad lo mismo que el excesivo alcohol en un individuo. Si un hombre abusa del alcohol y bebe demasiado, éste se rebela y habla de este modo al alcoholizado: “Dios me crió para curar y proporcionar alegría, usado racional y moderadamente, pero tú has abusado de mí. Por eso me vuelvo contra ti. Desde ahora, tendrás jaquecas, aturdimientos, dolor de estómago; perderás el uso de la razón y te harás mi esclavo, aunque yo no he sido criado para esto.”
Lo mismo ocurre con el átomo, que dice al hombre: “Dios me creó y puso en el universo la energía atómica, y por ello alumbra el sol al mundo. La gran fuerza que el Todopoderoso encerró en mi corazón fue creada para servir a fines pacíficos, para iluminar vuestras poblaciones, para impulsar vuestros motores, para aligerar el trabajo humano. En cambio, vosotros habéis robado el fuego del cielo, como Prometeo, y lo habéis empleado la primera vez para destruir ciudades enteras. Originariamente no se empleó electricidad para matar a ningún hombre, pero, en cambio, la energía atómica la habéis empleado para matar a millares de ellos. Por este motivo me volveré contra vosotros, haré que temáis lo que deberíais apreciar, y millones de pechos de entre vosotros temblarán horrorizados ante los enemigos que vendrán a devolveros lo que habéis hecho con ellos: transformaré la humanidad en un Frankestein que se defenderá metiéndose en los refugios antiaéreos contra los monstruos que habéis creado.” No es que Dios abandone al mundo, sino que el mundo ha abandonado a Dios al unir su suerte con la de la naturaleza, separada de la naturaleza de Dios.
La bomba atómica significa que el hombre se ha hecho esclavo de la naturaleza y de la física que había creado Dios para que le sirviera.
Este estado de cosas hace surgir una pregunta: “¿Hay aún alguna esperanza?” Ciertamente que sí, y ¡una muy grande esperanza!
La esperanza última es Dios, pero la gente está tan alejada de Él, que no logra salvar de un salto el abismo que le separa de Él.
Debemos partir de cómo sea el mundo, y el mundo está absorbido por la naturaleza, cuyo símbolo es actualmente la bomba atómica. El pensamiento de la Divinidad aparece muy alejado.
¿Y no habrá en toda la naturaleza creada algo puro e incontaminado con lo que podamos reemprender el camino de regreso?
Aquí lo tenemos: es lo que Wodsworth llamaba “la única gloria de la naturaleza corrompida”. Esta gloria y esperanza es la Mujer.
No es una diosa, no es de naturaleza divina, ni tiene, por tanto, derecho de que se le adore, aunque sí de que se le venere, y salió de la materia física y cósmica, pero tan sumamente santa y buena, que cuando Dios bajó a la tierra la eligió por Madre Suya y Señora del mundo. Es en extremo interesante hacer resaltar que la Teología de los rusos, antes de que el corazón de su pueblo se helase con las teorías de los enemigos de Dios, enseñaban que Jesucristo vino al mundo para iluminarle, cuando los hombres habían rechazado al Padre Celestial. Añadía que cuando el mundo hubiese rechazado a Jesucristo, como hace ahora, de las tinieblas de la noche del pecado surgiría Su Madre, para dar luz a la oscuridad y guiar al mundo hacia la paz.
La hermosa aparición de la Virgen Bendita de Fátima, en Portugal, de abril a octubre de 1917, fue una comprobación de la tesis rusa: cuando menos hubiere reconocido el mundo al Salvador, Él nos mandaría a Su Santísima Madre para salvarnos. Y fue precisamente en el mismo mes en que estalló la Revolución bolchevique cuando hizo la Virgen su principal revelación. En otra transmisión trataremos de lo que se dijo entonces. De lo que quiero hablar hoy es de la Danza del Sol, que se verificó el 13 de octubre de 1917. Los amantes de la Madre de Nuestro Señor no necesitan pruebas ulteriores. Y como los que desgraciadamente no conocen ni al Uno ni a la Otra preferirán los testimonios de quienes rechaza, ya sea a Dios o a Su Madre, presentaré la descripción hecha del fenómeno por el articulista ateo del entonces diario anárquico portugués “O Século.”
Dicho periodista fue uno de los 70,000 espectadores que observaron el prodigio. Y lo describe así: “Un espectáculo único e increíble… Puede verse la inmensa muchedumbre vuelta al sol, que aparece libre de nubes en pleno mediodía. El astro rey semeja un disco de plata y se le puede mirar sin molestia alguna… La gente, con la cabeza descubierta y presa de terror, abre los ojos, intentando escudriñar el azul del cielo. El sol se ha estremecido y hecho unos movimientos bruscos, sin precedentes y fuera de todas las leyes cósmicas: Según expresión gráfica de los campesinos, “El sol bailaba.” Daba vueltas en torno suyo, como una rodancha o rueda de juegos artificiales, y llegó casi a quemar la tierra con sus rayos… Queda para los competentes opinar sobre la danza macabra del sol, que hoy ha hecho Fátima que los pechos de los fieles prorrumpiesen en ¡Hosanas! Y a impresionado a los librepensadores y a los que menos se preocupan por los problemas religiosos.”
Otro diario ateo y anticlerical, “A Orden,” escribió: “El sol aparece circundado en unos momentos por llamas de color carmesí, y en otros, auroleado de amarillo y matices rojizos. Pareció girar sobre sí mismo en rápido movimiento de rotación, desprendiéndose aparentemente del cielo para acercarse a la tierra, irradiando un intenso calor.”
¿Por qué se serviría Dios Todopoderoso de la única fuente de luz y de calor indispensable a la naturaleza para revelarnos el mensaje de la Virgen e 1917, en la terminación de la primera guerra mundial, si no iban a arrepentirse los hombres? Solamente podemos hacer conjeturas. ¿Quería, acaso, significar que la bomba atómica oscurecería al mundo como un sol vacilante?
No lo creo.
Tengo por más seguro que fuese una señal de esperanza y que significase que la Virgen nos ayudaría a huir de la perversión de la naturaleza realizada por el hombre.
La Sagrada Escritura nos tiene anunciado: “Después aparecerá un gran prodigio en el cielo, una mujer que tendrá al sol por manto” (Apocalipsis, 12, 1).
Durante siglos y siglos ha dicho la Iglesia en sus cantos a María, “Electa ut Sol,” bella como el sol, que da la vuelta al mundo esparciendo su luz por doquier, salvo donde los hombres se guardasen de ella, calentando lo que estuviere frío, abriendo los capullos para convertirlos en flores y dando fuerza a lo que estuviere debilitado. ¡Fátima no es una advertencia, sino una esperanza!
Mientras el hombre toma el átomo y lo desintegra para anonadar al mundo, María mueve el sol como un juguetillo colgado de su muñeca para convencer al mundo de que Dios le ha conferido un enorme poder sobre la naturaleza, pero no para la muerte, sino para la luz, la vida y la esperanza.
El problema del mundo moderno no es la existencia de la gracia, sino la existencia de la naturaleza y su necesidad de la gracia.
María es el eslabón de conjunción y nos asegura que no se nos destruirá porque la misma central de la energía atómica, el sol, es un juguete en sus manos.
De la misma manera que Cristo hace de mediador entre Dios y el hombre, la Virgen hace de mediadora entre el mundo y Cristo.
Así como un hijo desnaturalizado que se hubiese rebelado contra su padre y se hubiese marchado de la casa paterna se dirigiría a la madre, al querer volver, para que intercediese con el padre, de igual modo debemos recurrir nosotros a María, la única criatura pura y sin mancha que puede interceder entre nosotros, hijos rebeldes, y su Divino Hijo.
No es necesaria una tercera guerra mundial, y aun lo será menos si ponemos a la Mujer contra el átomo.
La ciencia ha hecho cuanto estaba de su parte para nuestra comodidad en la tierra, y ahora, por el contrario produce una cosa que podría dejarnos a todos sin hogar. Temerosos de esto, volvámonos a la Mujer, que también se vio sin techo protector porque “no había sitio en las posadas”.
Rusia es cierto que quisiera conquistar el mundo para Satanás. Pero nosotros seguimos esperando. Entre las criaturas hay una mujer que puede acercarse al mal sin que ésta la muerda. En los albores de la historia de la humanidad, cuando el diablo tentó al hombre para que le sustituyese su amor a Dios por el egoísmo, Dios prometió que el talón de una Mujer aplastaría la cabeza de la serpiente. Que en vez de una cobra roja que mate sean la hoz y el martillo, tiene poca importancia para la Mujer a través de la cual conquiste Dios la hora del mal. Empezad por rezar como no lo habéis hecho hasta el presente. Rezad el Rosario por la mañana, mientras os dirigís al trabajo, en vuestra casa cuando tengáis un rato libre y durante vuestro trabajo en el campo o en el almacén.
¡Si rezamos, no habrá más guerra! Eso es absolutamente cierto.
El pueblo ruso no ha de conquistarse mediante una guerra. ¡Demasiado ha sufrido en estos treinta y tres últimos años!
Se debe acabar con el comunismo, y esto puede lograrse mediante una revolución interior.
Rusia no tiene contra sí una bomba atómica tan sólo, sino dos. La segunda bomba es el sufrimiento de su pueblo, que gime bajo el yugo de la esclavitud. ¡Cuando explote, lo hará con una fuerza infinitamente superior a la del átomo!
Pero también tenemos nosotros necesidad de una revolución como Rusia.
Nuestra revolución debe venir desde el interior de nuestros corazones, es decir, que hemos de reconstruir nuestras vidas, del mismo modo que la revolución rusa debe comenzar por el interior, sacudiéndose el yugo de Satanás.
La revolución rusa marchará al paso de la nuestra. Pero, sobre todo, hemos de tener esperanza. Si para el mundo no hubiese esperanza de salvación, ¿hubiese enviado Jesús a Su Madre con la energía atómica del sol a sus órdenes?
¡Oh María! Hemos desterrado a tu Divino Hijo de nuestras vidas, de nuestras asociaciones, de nuestra educación y de nuestras familias. ¡Ven con la luz del sol como símbolo de Su Poder! Rompe nuestras guerras, nuestra oscura inquietud. Enfría la boca de los cañones encendidos por la guerra. Aparta nuestras mentes del átomo y nuestras almas del abuso de la naturaleza.
Haznos renacer en tu Divino Hijo a nosotros tus ya antiguos hijos de la tierra.
¡Por el amor de Jesús!


Mons. Fulton J. Sheen., visto en Ecce Christianvs, 28-Ago-2014.

miércoles, 27 de agosto de 2014

El universo tridimensional de la Fe.


“En los días de fe, los hombres vivían en un universo tridimensional: arriba los cielos, debajo el infierno y la tierra entre ambos (…) Pero desde hace unos dos siglos, desde que los hombres comenzaron a perder la fe en Dios, también fueron siendo dejadas las otras grandes verdades eternas. La moralidad comenzó a declinar y los hombres ya no se vieron a sí mismos como habitantes del universo tri-dimensional. Redujeron la vida a una sola dimensión: la superficie plana de la tierra; creyeron sentir que, gracias a la ciencia, a la evolución y al inevitable progreso, sería posible para cada uno llegar a ser una especie de dios y disfrutar en la tierra de su cielo”.

Mons. Fulton J. Sheen., citado por Flavio Mateos en su dossier sobre Hitchcock.

jueves, 21 de agosto de 2014

San Pío X, hoy.


San Pío X, hoy

Por César Félix Sánchez Martínez [1]


Ante el práctico silencio de la Santa Sede y de gran parte de la jerarquía eclesiástica, ayer se cumplieron cien años del óbito de San Pío X (1835-1914). No sorprende, pues desde hace cierto tiempo en materias eclesiásticas y vaticanas ya nada sorprende, pero sí entristece a los fieles constatar esta indiferencia, que parece más bien ocultar una hostilidad sorda, que no osa siquiera dar razones porque no las tiene, y que ante figuras e instituciones católicas que no se encuentran protegidas por el dulce abrazo de la Gloria, como es el caso del Santo Pontífice, se manifiesta con toda  libertad, arbitraria e inmisericorde. Entristece sobremanera, porque de un tiempo a esta parte, los Jerarcas, incluso  hasta en lo más alto, se esfuerzan ridículamente por servir de comparsas al mundo, compitiendo con las efemérides de Wikipedia, los noticieros de farándula y los boletines deportivos, en conmemorar eventos como el día de la tierra, el mundial o a John Lennon. Aquellos que no escatiman recursos ni gestos para mitificar a determinadas figuras ambiguas e instaurar –en actos sin precedente en la historia de la Iglesia- grotescos cultos a la personalidad, ahora callan.
Sin embargo, nos queda como consuelo el meditar en la enseñanza de la vieja fábula de Tomás de Iriarte:

Guarde para su regalo
esta sentencia el autor:
si el sabio no aprueba, ¡malo!
si el necio aplaude, ¡peor!

Porque como de sobra lo demuestra la experiencia, hay elogios que en verdad insultan.

Otros sí recordarán a San Pío X. Otros, que hasta hace poco tiempo eran legión, pero que ahora, constreñidos por las contradicciones, se encuentran reducidos y desmoralizados, convertidos en angustiados truchimanes de una especie de fuerza de la naturaleza, teniendo que reinterpretar, violentando su mente y su conciencia, patentes errores o grotescas estulticias para convertirlas en tautologías o en galimatías, que son más pasables. Harán un elogio de San Pío X, pero como tantas otras cosas, ese elogio saldrá de sus bocas convertido en una forma vacía, un eslogan neutro y sin contenido, que podría ser aplicado a cualquier figura de la historia sagrada o incluso profana. Y a ese «estilo» de pensar y de escribir, muchos le llaman ahora «sana doctrina». ¡Ay del tiempo en que la ambigüedad máxima o el vacío sofista son anhelados y atesorados!
Los santos, a diferencia del individuo cósmico histórico de Hegel, no son instrumentos del «progreso de la historia» o meros filántropos buenaonda o, como parece ser ahora con tantos neocanonizados, mitos fabricados  por el marketing  para la manipulación de masas; los santos son los Predestinados de Dios, cuya virtud heroica, especialmente en el cumplimiento extraordinario del deber de estado, ilumina a los fieles. 

¿De qué sirve llenarse la boca con homenajes sino se imita al homenajeado? ¿Y cómo podemos imitar a San Pío X? En primer lugar, con una fidelidad inquebrantable a Cristo y a los frutos de la Redención, eso es la Iglesia, la liturgia y la Cristiandad, no entendidas solo como «realidades pastorales» ni como gnosis antropocéntricas, sino como, en palabras de Bossuet «Cristo multiplicado y repartido», en distintos sentidos análogos. Pastoralmente, nos enseña aquello que los críticos contemporáneos -críticos que incluso contemplaron su grandeza- llamaban el «idealismo» en las relaciones con los Estados; sana y santa intransigencia ante las traiciones, contemporizaciones y raillements. Intransigencia que sería fructífera: Los Estados Católicos, reconstruidos después de dos siglos de vorágine revolucionaria, en Austria, en España y en Portugal, los cristeros y los carlistas, el renacimiento intelectual católico fueron parte de sus frutos. Luego, los enemigos internos de la Iglesia derrumbaron los frutos materiales de esa acción, pero su legado espiritual se vivifica, a pesar del pontificado actual, que en tantos y tantos aspectos parece su antónimo absoluto.
El mismo Santo Pontífice lo manifestó, de forma profética, en la carta encíclica Communium rerum sobre San Anselmo, del 21 de abril de 1909: «Están pues muy equivocados los que creen y esperan para la Iglesia un estado permanente de plena tranquilidad, de prosperidad universal, y un reconocimiento práctico y unánime de su poder, sin contradicción alguna; pero es peor y más grave el error de aquellos que se engañan pensando que lograrán esta paz efímera disimulando los derechos y los intereses de la Iglesia, sacrificándolos a los intereses privados, disminuyéndolos injustamente, complaciendo al mundo ‘en donde domina enteramente el demonio’, con el pretexto de simpatizar con los fautores de la novedad y atraerlos a la Iglesia, como si fuera posible la armonía entre la luz y las tinieblas, entre Cristo y el Demonio. Son éstos, sueños de enfermos, alucinaciones que siempre han ocurrido y ocurrirán mientras haya soldados cobardes, que arrojen las armas a la sola presencia del enemigo, o traidores, que pretendan a toda costa hacer las paces con los contrarios, a saber, con el enemigo irreconciliable de Dios y de los hombres».
Palabras que resuenan, como una voz que clama en el desierto, en un desierto en el que nos hemos acostumbrado a la traición, a la heterodoxia y a la chabacanería, cohonestadas con la excusa cada vez más triste y ridícula de «enfoques pastorales» por algunos.
Supo, por sobre todo, cumplir con su deber de Vicario de Cristo a través de las «seguridades doctrinales» que brindó a manos llenas. «Seguridades» ahora inexplicable y escandalosamente combatidas por quienes deberían, por amor a Cristo, darlas, especialmente en tiempos de tan grave confusión. En un artículo publicado en The Tablet el 29 de agosto de 1914, Monseñor R.H. Benson escribía: «Y ahora no hay prácticamente cristiano –en el sentido histórico de la palabra, es decir, que crea que la misión de Cristo yace en la revelación que promulgó y no meramente en el impulso que su venida otorgó a la aspiración espiritual del hombre- sin importar cuán lejos estén sus simpatías de la interpretación católica de los contenidos de la revelación, que no reconozca que Pío se mantuvo firme donde otros líderes religiosos flaquearon o contemporizaron, y que Roma, bajo su liderazgo, se puso del lado de la pura y simple verdad evangélica, de la autoridad de las Sagradas Escrituras y de la divinidad de Cristo».
¡De qué sirve admirar sino se imita! Y qué es imitar, en este caso, sino militar, militar por instaurare omnia in Christo, sin ningún temor e inflamados por la caridad de Dios, porque tenemos un tan grande valedor en el Cielo.


[1] Profesor de filosofía

Tomó en su manos esta gloriosa copa...

Noticia vista en Secretum Meum Mihi, 20-Ago-2014.


Información de agencia Reuters, 20-Ago-2014.

CIUDAD DEL VATICANO (Reuters) - El Papa Francisco recibió el miércoles en el Vaticano a representantes de San Lorenzo, el club del fútbol argentino del que es un reconocido hincha, quienes le llevaron la recientemente conquistada Copa Libertadores de América y le prometieron volver en diciembre si ganan el Mundial de Clubes.

San Lorenzo se consagró campeón de la Libertadores la semana pasada por primera vez en la historia para dejar atrás el estigma de ser el único de los equipos argentinos considerados "grandes" que no había levantado el trofeo continental.

Francisco recibió la Copa y saludó efusivamente a los representantes del club de sus amores. "De modo especial saludo a los campeones de América. El equipo de San Lorenzo aquí presente. Es parte de mi identidad cultural", dijo el Pontífice.

El presidente de San Lorenzo, Matías Lammens, le dijo a Francisco que espera volver a verlo pronto. "Dios quiera que podamos volver en diciembre después de ganarle al Real", señaló.

San Lorenzo jugará el Mundial de Clubes en diciembre, torneo en el que también participará el Real Madrid como campeón de Europa.

"Es un día muy especial, le dí mi pésame, nos decía que la llegada nuestra le había alegrado el día", dijo Lammens a la prensa argentina.

Francisco está muy apesadumbrado por la muerte el martes de tres de sus familiares en un accidente automovilístico en Argentina.

La esposa de uno de los sobrinos del Pontífice y sus dos pequeños hijos, de ocho meses y dos años, fallecieron en horas de la madrugada cuando el vehículo en el que viajaban chocó contra un camión en una autopista en el norte de la central provincia de Córdoba.

Un sobrino del Papa, que manejaba el automóvil, se encuentra en grave estado.

En la delegación estuvieron varios dirigentes de San Lorenzo, así como el entrenador Edgardo Bauza y los futbolistas Juan Mercier y Julio Buffarini.

Estas son unas imágenes que proporciona L'Osservatore Romano vía agencia AFP.













Efecto Francisco: Bautizarán a la hija de la primera pareja de transexuales de Victoria.

Continúa el “efecto Francisco” de el “¿quién soy yo para juzgar?”. La degeneración y aberración no tiene límites, ahora, con una visto bueno eclesiástico de por medio. Noticia aparecida en El Once, 21-Ago-2014.


Bautizarán a la hija de la primera pareja de transexuales de Victoria

9:37 Hs | Génesis Angelina será bautizada por el Padre Raúl Benedetti, el 19 de septiembre en la parroquia Nuestra Señora Aránzazu de Victoria. Sus padres, la primera pareja de transexuales, valoraron la inclusión que la Iglesia hará de su hija.

Génesis Angelina Taborda Bruselario, la bebé de ocho meses será bautizada por el Padre Raúl Benedetti, el próximo viernes 19 de setiembre a las 20 en la parroquia Nuestra Señora Aránzazu de Victoria. La ceremonia será en el transcurso de la misa diaria que se realiza en la parroquia de esa ciudad. Según comentaron sus padres, Karen Evangelina Bruselario y Alexis Taborda, la pareja de transexuales de Victoria, en esa oportunidad podrán conocer a Génesis Angelina y sus madrinas serán, Roxana Albarracín y Rita Taborda, mientras que sus padrinos serán Agustina Arce y Joy Ojeda. 

En el dialogo con Diario Victoria los padres de la beba comentaron que el padre Raúl Benedetti realizará la ceremonia de bautismo en una misa que celebrará ese día el sacerdote, que llegará a la ciudad especialmente para instituirle el primer sacramento de la religión católica, como lo prometió en una ocasión antes de retirarse a la ciudad de Gualeguaychú. 

“Estamos muy contentos porque tal como nos dijo el padre Raúl va a venir a bautizarla en breve a la Parroquia”, contó Karen. En tanto, el Alexis, que gestó a la niña en su vientre, dijo que la Iglesia la incluye, eso hace más sencillo la inclusión y la aceptación social para la niña. Los padres aseguraron que el bautismo será una ocasión especial para que los ciudadanos de Victoria conozcan a Génesis. “Todo el mundo pregunta por ella y en verdad no la hemos podido presentar, así que ésta va a ser una hermosa oportunidad para que la vean”. 

“Para nosotros es importante este acontecimiento porque de alguna manera nos da la felicidad de que no será rechazada por la sociedad, como algún día lo fuimos nosotros. Aunque ninguna organización nos acompaña, estamos orgulloso porque abrimos un nuevo camino donde la Iglesia escribirá un nuevo capítulo bautizando a la primera niña, hija de dos padres transexuales en el mundo”, publicaron los orgullosos padres en las redes sociales. 

Para garantizar la formación cristiana de la niña han sido elegidos como madrinas Roxana Albarracín, cuñada de Karen, y Rita Taborda, hermana de Alexis. En tanto los padrinos serán Agustina Arce, amiga transexual de la pareja, sin cambio de identidad, y Joy Ojeda, amigo trans con identidad adquirida. 

Karen Bruselario (28) nació varón, pero figura en su DNI como mujer. Alexis Taborda (26) nació mujer, pero también rectificó su documento con su identidad de género autopercibida. 

La pareja contrajo matrimonio el año pasado en el Registro Civil de Victoria bajo los flashes de cámaras fotográficos de todo el mundo que siguieron con curiosidad la historia de amor donde un hombre se casaba embarazado.
Karen y Alexis intentaron concretar su unión también ante la Iglesia Católica, pero la iglesia no lo permitió.

miércoles, 20 de agosto de 2014

Francisco en rueda de prensa en su viaje de retorno de Corea a Roma.


Rueda de prensa de Francisco, en su viaje de retorno a Roma, luego de la visita a Corea. Publicada en Vatican Insider, 18-Ago-2014.

Papa Francisco sobre Irak: que decida la Onu cómo detener la agresión

En la entrevista durante el vuelo, Francisco habló sobre la violencia del Isis: «Es lícito detener al agresor injusto. Digo ‘detener’, no bombardear, hacer la guerra…» Bergoglio quería ir a la zona del conflicto. Está listo para visitar China. Confirma el viaje a los Estados Unidos con visita a las Naciones Unidas

ANDREA TORNIELLI
VUELO SEÚL-ROMA

La situación de las minorías religiosas obligadas a abandonar Irak, las violencias del Isis, los bombardeos estadounidenses. La guerra en Gaza después de la oración por la paz. Las relaciones con China, los próximos viajes. la nueva encíclica y las vacaciones «en casa» del Papa. Estos son los argumentos que Francisco expuso tras las 15 preguntas que le hicieron los periodistas durante el vuelo.

La agresión del Isis contra las minorías cristianas en Irak y las bombas estadounidenses

En estos casos, en los que hay una agresión injusta, solo puedo decir que es lícito «detener» a agresor injusto. Subrayo el verbo «detener», no digo bombardear, hacer la guerra, sino detenerlo. Los medios con los que se puede detener deberán ser evaluados. Detener al agresor injusto es lícito. Pero debemos tener memoria; cuántas veces bajo este pretexto de detener al agresor injusto las potencias se han adueñado de los pueblos y han hecho la guerra de conquista. Una sola nación no puede juzgar cómo se detiene a un agresor injusto. Después de la Segunda Guerra Mundial nació la idea de las Naciones Unidas, es allí en donde se debe discutir y decir: ‘¿Hay un agresor injusto? Parece que sí. Entonces, ¿cómo lo detenemos?’. Solo esto, nada más. En segundo lugar, las minorías. Gracias por haber usado esta palabra. Porque a mí me hablan de cristianos, los que sufren , los mártires. Y sí, hay muchos mártires. Pero aquí hay hombres y mujeres, minorías religiosas, no son todos cristianos, y todos son iguales frente a Dios. Detener al agresor injusto es un derecho que la humanidad tiene, pero también es un derecho que tiene el agresor de ser detenido, para que no haga mal.

La posibilidad de una visita a Irak, en la zona de conflicto

Estoy dispuesto a ir a Irak y creo poder decirlo: cuando con mis colaboradores supimos la noticia de esta situación, de las minorías religiosas y también en aquel momento que Kurdistán no podía recibir a tanta gente, pensamos muchas cosas. Lo primero fue escribir el comunicado que hizo el padre Federico Lombardi. Después este comunicado fue enviado a todas las nunciaturas para que fuera transmitido a los gobiernos. Después escribimos al Secretario general de las Naciones Unidas y decidimos mandar un enviado personal, el cardenal Filoni. Al final, dijimos que, si era necesario después del viaje a Corea, podía ir allí; era una de las posibilidades. ¡Estoy dispuesto! En este momento no es lo mejor, pero estoy dispuesto a ello.

¿La oración por la paz con Mahmoud Abbas y Peres fue un fracaso?

La oración por la paz no fue absolutamente ningún fracaso. Estos dos hombres son hombres de paz, son hombres que creen en Dios y que han vivido muchas cosas feas, muchas cosas feas, y están convencidos de que la única vía para resolver los problemas es la de la negociación, del diálogo, de la paz. ¿Fue un fracaso? Yo creo que la puerta está abierta. La paz es un don de Dios, que se merece nuestro trabajo, pero es un don. Y hay que decir a toda la humanidad que la mesa de la negociación es importante, pero también lo es la de la oración. Pero esto es coyuntural. Ese encuentro no era una coyuntura; es un paso fundamental de la actitud humana, una oración. Ahora, el humo de las bombas y de las guerras no dejan ver esa puerta, pero la puerta permaneció allí, abierta, desde aquel momento. Creo en Dios, creo en el Señor, esa puerta está abierta, y pidamos que nos ayude.

Las víctimas de la guerra

Hoy nosotros vivimos en un mundo en guerra, ¡por todas partes! Alguien me decía: ‘Sabe usted, padre, que estamos en la tercera guerra mundial, pero en pedacitos. En capítulos’. Es un mundo en guerra en donde se hacen estas crueldades. Una vez se hablaba sobre la guerra convencional, ahora ya no cuenta. No digo que las guerras convencionales sean algo bueno, no. Pero hoy va la bomba y mata al inocente con el culpable, al niño con la mujer, con la madre, mata a todos. Pero, detengámonos a pensar un poco a nivel de crueldad, ¿a dónde hemos llegado? Esto debería espantarnos. No es para dar miedo. El nivel de crueldad de la humanidad en este momento espanta un poco.

La tortura

Hoy la tortura es uno de los medios casi ordinarios en los comportamientos de los servicios de inteligencia y en algunos procesos judiciales. Y la tortura es un pecado en contra de la humanidad, un delito de lesa humanidad. Digo a los católicos: torturar a una persona es pecado mortal, es pecado grave. Pero es mucho más: es un pecado contra la humanidad. La crueldad y la tortura. Me gustaría mucho que ustedes, en sus medios, hicieran una reflexión sobre cuál es hoy el nivel de crueldad de la humanidad, y sobre lo que piensan sobre la tortura. Creo que nos haría bien a todos nosotros reflexionar sobre esto.

Las relaciones entre la Santa Sede y China; la posibilidad de un viaje papal.

Cuando, a la ida, estábamos por volar a través del espacio aéreo chino, fui a la cabina y uno de los pilotos me mostró un registro y me explicó que solo faltaban diez minutos para entrar al espacio aéreo chino y que teníamos que pedir la autorización (una cosa normal que hay que hacer siempre con cada país) y sentí cómo pedían la autorización y cómo respondían; fui testigo de ese momento. El piloto dijo: ahora parte el telegrama, no sé cómo haya hecho, pero lo hizo. Después me despedí de los pilotos y volví a sentarme y recé tanto, por ese hermoso pueblo chino: un pueblo sabio. Pienso en todos los grandes sabios chinos, pienso en la historia de ciencia, de sabiduría… También nosotros los jesuitas tenemos nuestra historia allí, con Matteo Ricci… ¿Que si quiero ir a China? ¡Pero claro! ¡Mañana! Nosotros respetamos al pueblo chino. La Iglesia pidió solamente la libertad para su ministerio, para su trabajo. Ninguna otra condición. Y luego no hay que olvidar la carta fundamental para el problema chino, la que envió a los chinos Papa Benedicto XVI. Esa carta hoy sigue siendo actual. Hace bien volver a leerla. La Santa Sede siempre ha estado abierta a los contactos, siempre, porque tiene un verdadero afecto por el pueblo chino.

Los próximos viajes y la esperanza de verlo en España, en Ávila, en 2015.

Este año tenemos prevista Albania. Voy por dos motivos importantes. En primer lugar porque lograron hacer un gobierno (pensemos en los Balcanes), un gobierno de unidad nacional, entre musulmanes, ortodoxos, católicos, con un consejo interreligioso que ayuda mucho y que es equilibrado. Sentí como si mi presencia fuera una ayuda a ese noble pueblo. El segundo motivo es este: pensemos en la historia de Albania, el único de los países comunistas que en su Constitución tenía el ateísmo práctico. Si tu ibas a Misa, ¡era anticonstitucional! Y luego, me decía uno de los ministros, que fueron destruidas (y quiero ser preciso con la cifra) 1820 Iglesias, ortodoxas y católicas. En aquel tiempo muchas Iglesias fueron transformadas en cines, teatros, salas de baile. Yo sentí que tenía que ir, y un día hay que hacerlo. Luego, el próximo año quisiera ir a Philadelphia, al encuentro de las familias, y también fui invitado por el presidente de los Estados Unidos al parlamento estadounidense y también por el Secretario de las Naciones Unidas a Nueva York (tal vez las tres ciudades juntas: Philadelphia, Washington e New York). Los mexicanos quieren que vaya en esa ocasión también a la Virgen de Guadalupe, y se podría aprovechar, pero no es seguro. Y al final a España. Los reyes me invitaron, el episcopado me invitó, pero no hemos decidido.

La relación con Benedicto XVI

Nos vemos. Antes de partir fui a visitarlo. Dos semanas antes, me envió un escrito interesante y me pedía mi opinión. Tenemos una relación normal. Porque alrededor de esta idea, que tal vez no le gusta a algunos teólogos (yo no soy teólogo), creo que el Papa emérito no es una excepción. Yo creo que el Papa emérito sigue siendo una institución, porque nuestra vida se alarga y a una cierta edad ya no se tiene la capacidad para gobernar bien, porque el cuerpo se cansa… La salud tal vez sea buena, pero ya no se tiene la capacidad de sacar adelante todos los problemas de un gobierno como el de la Iglesia… ¿Y si yo sintiera que ya no puedo seguir? Haría lo mismo. Rezaré, pero creo que haría lo mismo. Somos hermanos, y ya he dicho que es como tener al abuelo en casa, por su sabiduría. Es un hombre de sabiduría. Me hace bien escucharlo. Y él me anima bastante.

Usted tiene una vida llena de compromisos. Poco descanso, nada de vacaciones. ¿Hay que preocuparse por el ritmo que lleva?

Sí, hay quienes me lo han dicho. Yo pasé las vacaciones en casa, como hago normalmente. Una vez leí un libro, interesante, que se titulaba: ‘Alégrate por ser un neurótico’. Yo también tengo alguna neurosis y hay que curarla bien, ¿eh? La mía es que son un poco apegado a mi hábitat. La última vez que fui de vacaciones, con la comunidad jesuita, fue en 1975. Siempre hago vacaciones, pero en mi hábitat, cambio de ritmo: duermo más, leo cosas que me gustan, escucho música, rezo más. Y esto me descansa. En julio hice mucho todo esto. Es cierto, el día que tenía que ir al Gemelli, hasta diez minutos antes tenía que ir, pero no pude. Habían sido días muy llenos. Ahora sé que tengo que ser prudente. Tienes razón…

¿Cómo vive la inmensa popularidad de la que goza?

Yo la vivo agradeciendo al Señor de que su pueblo sea feliz, esperando lo mejor para el pueblo. La vivo como generosidad del pueblo, del verdadero pueblo… Dentro, trato de pensar en mis pecados, en mis errores, para no creérmela, porque yo sé que esto durará como yo, dos o tres años, y luego… ¡a la casa del Padre! La vivo como presencia del Señor en su pueblo que usa al obispo, que es el pastor del pueblo, para manifestar muchas cosas. La vivo con más naturalidad que antes, porque me espantaba un poco.

¿Cómo vive en el Vaticano, más allá del trabajo?

Trato de ser más libre. Hay citas de trabajo, pero la vida para mí es lo más normal que se puede hacer. Me gustaría salir más, pero no se puede. Y luego en Santa Marta hago la vida normal de trabajo, de descanso, de pláticas… ¿Que si me siento prisionero? No. Al principio sí, pero después cayeron algunos muros… Por ejemplo (sonríe): el Papa no podía usar el elevador solo, ¡inmediatamente alguien venía para acompañarlo! ‘¡Tú, vete a tu sitio, que yo bajo solo!’. Y se acabó la historia. Es así… la normalidad, la normalidad.

La próxima encíclica dedicada a la defensa de la creación.

He hablado de esta encíclica con el cardenal Turkson y también con los otros. Y le pedí a Turkson que recopilara todas las contribuciones que hubieran llegado. Antes del viaje, el cardenal me entregó el primer borrador. Es así de grande, un tercio más que la Evangelii gaudium. Es el primer borrador. Se trata de un problema no fácil, porque se trata de la custodia de la creación, también de la ecología (hay ecología humana); se puede hablar con cierta seguridad, pero hasta cierto punto. Y luego vienen todas las hipótesis científicas, algunas bastante seguras y otras no. Es una encíclica que debe ser magistral y debe salir adelante solo con las seguridades, con las cosas sobre las que estamos seguros. Si el Papa dice que el centro del universo es la Tierra y no el Sol, se equivoca, porque está diciendo una cosa que científicamente no funciona. Es lo que sucede ahora; debemos hacer un estudio párrafo por párrafo. Creo que será más pequeña, porque hay que ir a lo esencial, que es lo que se puede afirmar con seguridad. Se puede añadir en las notas al pie de página que sobre este o aquel argumento hay esta o esa hipótesis. Pero darlo como información, no en el cuerpo de una encíclica, que es doctrinal y debe ser segura.

La beatificación del arzobispo salvadoreño Romero


La causa estaba bloqueada, se decía que por prudencia, en la Congregación de la Doctrina de la Fe. Ahora ya no. Pasó a la Congregación para los santos y sigue el camino normal de un proceso; depende de cómo se muevan los postuladores. Es muy importante hacerlo de prisa. Porque, lo que me gustaría a mí es que se aclare cuando hay un martirio ‘in odium fidei’, por confesar el Credo o por hacer las obras que Jesús nos manda con el prójimo. Este es un trabajo de teólogos, que lo están estudiando. Detrás de Romero está Rutilio Grande y hay otros. Otros que fueron asesinados que no tienen la misma altura de Romero; hay que distinguir teológicamente todo esto. Para mí, Romero es un hombre de Dios. Se debe continuar el proceso, el Señor debe dar uno de sus signos; si lo quiere hacer, lo hará. Ahora los postuladores deben moverse, porque ya no hay impedimentos.

20 de Agosto de 1914-2014: Centenario del fallecimiento de San Pío X.


San Pío X: en el Centenario de su fallecimiento, 20 de Agosto 1914-2014, las palabras de un valiente Pontífice, de un santo varón, de un hombre que no temía a los poderosos del mundo y que tenía la liberalidad de hablar con la claridad que la luz de la verdad produce en los hombres adheridos a la santa Tradición católica:

“No hay verdadera fraternidad fuera de la caridad cristiana, que por amor a Dios y a su Hijo Jesucristo, nuestro Salvador, abraza a todos los hombres, para ayudarlos a todos y para llevarlos a todos a la misma fe y a la misma felicidad del cielo. Al separar la fraternidad de la caridad cristiana así entendida, la democracia, lejos de ser un progreso, constituiría un retroceso desastroso para la civilización. Porque, si se quiere llegar, y Nos lo deseamos con toda nuestra alma, a la mayor suma de bienestar posible para la sociedad y para cada uno de sus miembros por medio de la fraternidad, o como también se dice, por medio de la solidaridad universal, es necesaria la unión de los corazones en el amor de Dios y de su Hijo Jesucristo. Esta unión no es realizable más que por medio de la caridad católica, la cual es, por consiguiente, la única que puede conducir a los pueblos en la marcha del progreso hacia el ideal de la civilización”.

San Pío X, ¡ruega por nosotros!

jueves, 14 de agosto de 2014

Tolkien: amor, matrimonio y divorcio.


Reproducimos a continuación algunos fragmentos de una carta escrita por J.R.R. Tolkien a su hijo en marzo de 1.941 a propósito del amor, el matrimonio y el divorcio:

“En nuestra cultura, la tradición caballeresca romántica (…) empezó como un juego cortesano artificial, una manera de gozar del amor por sí mismo sin referencia (y en verdad opuesto) al matrimonio. (…) Tiende todavía a hacer de la mujer una especie de estrella conductora o divinidad (…). Esto es por supuesto fácil y, en el mejor de los casos, un artificio. (…) Evita, o cuanto menos en el pasado ha evitado, que el hombre joven vea a las mujeres tal como son: como compañeras de naufragio, no como estrellas conductoras. (…) Inculca una exagerada noción del “amor verdadero”, como fuego venido desde fuera, una exaltación permanente, sin relación con la edad, el nacimiento de hijos y la vida cotidiana, y sin relación tampoco con la voluntad y los objetivos (…).
Sin embargo, la esencia de un mundo caído consiste en que lo mejor no puede obtenerse mediante el libre gozo o mediante lo que se denomina “autorealización” (por lo general, un bonito nombre con el que se designa la autocomplacencia…), sino mediante la negación y el sufrimiento. La fidelidad en el matrimonio cristiano implica una gran mortificación (…). No hay hombre, por fielmente que haya amado a su prometida y novia cuando joven, que le haya sido fiel ya convertida en su esposa en cuerpo y alma sin un ejercicio deliberadamente consciente de la voluntad, sin autonegación. A muy pocos se les advierte eso, aún a los que han sido criados “en la Iglesia”. Los que están fuera de ella rara vez parecen haberlo escuchado. Cuando el hechizo desaparece o sólo se vuelve algo ligero, piensan que han cometido un error y que no han encontrado todavía a la verdadera compañera del alma. Con demasiada frecuencia la verdadera compañera del alma es la primera mujer sexualmente atractiva que se presenta. Alguien con quien podrían casarse muy provechosamente “con que sólo” (…). De ahí el divorcio, que proporciona ese “con que sólo” (…). Pero el verdadero compañero del alma es aquel con el que se está casado de hecho (…) sólo la más feliz de las suertes reúne al hombre y a la mujer que están, por decirlo así, mutuamente “destinados”, y son capaces de un amor grande y profundo. La idea todavía nos deslumbra (…) se han escrito sobre el tema una multitud de poemas e historias, más, probablemente, que el total de tales amores que han existido en la vida real (sin embargo, los más grandes de esos cuentos no nos hablan de feliz matrimonio de esos grandes enamorados, sino de su trágica desaparición; como si aún en esta esfera lo de verdad grande y profundo en este mundo caído sólo se lograra por el fracaso y el sufrimiento). En este gran amor inevitable, a menudo amor a primera vista, tenemos un atisbo, supongo, del matrimonio tal como habría sido en un mundo que no hubiera caído. En éste tenemos como únicas guías la prudencia, la sabiduría (rara en la juventud, demasiado tardía en la vejez), la limpieza de corazón y la fidelidad de voluntad (…)”


viernes, 8 de agosto de 2014

Lo que falla en el mundo.


Cuentan de G. K. Chesterton que cuando el diario The Times lo invitó, junto con otros autores eminentes, a escribir ciertos ensayos en respuesta a la pregunta “¿Qué es lo que falla en el mundo?” su contribución tomó forma de carta:

Dear Sirs,
I am.
Sincerely yours,
G. K. Chesterton

Que en castellano vendría a ser más o menos:

Apreciados Señores,
Yo.
Les Saluda atentamente,
G.K. Chesterton

El “príncipe de las paradojas” fue capaz de sintetizar de esta forma tan particular lo que, en el fondo, es la respuesta bíblica.
¿Qué falla en el mundo? ¿Dónde está el problema? Son preguntas a las que toda forma de pensamiento debe dar respuesta. Todos tenemos la sensación de que ha habido alguna clase de “fractura”, y seguro que nos hemos preguntado alguna vez porqué las cosas en nuestro mundo no son como deberían ser.
Como dijo Jesús, buscar fuera de nosotros mismos no nos dará la respuesta, sino que es de nuestro corazón que proviene toda clase de injusticias (Mateo 15:19)
Sólo el Evangelio va a la raíz del problema y produce un cambio en nuestro interior que tiene consecuencias en el exterior. Los problemas siempre suelen ser culpa de otros, nuestro dedo enseguida señala hacia los demás. Pero el Evangelio nos hace realizar un duro, pero en el fondo realista, ejercicio de autocrítica. Es verdad, somos más pecadores de lo que creíamos… pero cuando aceptamos esa verdad Jesús nos sale al encuentro para decirnos que también somos más amados por Dios de lo que creíamos.
  
(Tomado de un blog no católico)


Visto en Videoteca Reduco, 03-Dic-2013.

miércoles, 6 de agosto de 2014

Habla el marxista rehabilitado: Fidel Castro es un elegido de Dios para llevar mensaje a América Latina.


D'Escoto en al ONU

El rehabilitado D'Escoto sigue hablando ahora que tiene patente de corso. En esta ocasión en un canal televisivo local nicaraguense. Esta es una reseña de agencia EFE, Ago-05-2014.

Managua, 5 ago (EFE).- El sacerdote y excanciller nicaragüense Miguel D'Escoto Brockmann dijo hoy que el líder cubano Fidel Castro es un elegido de Dios para transmitir el mensaje del Espíritu Santo en América Latina.

"El Vaticano puede silenciar a todo el mundo, entonces Dios hará que las piedras hablen y que las piedras transmitan su mensaje, pero no hizo eso, escogió al más grande latinoamericano de casi todos los tiempos: Fidel Castro", declaró el religioso, de 81 años, al Canal 4 de la televisión local.

D'Escoto Brockmann, actual asesor para asuntos limítrofes y de relaciones internacionales del Gobierno del presidente de Nicaragua, el sandinista Daniel Ortega, brindó estas declaraciones un día después de que El Vaticano hiciera pública la decisión papal de levantarle la "suspensión a divinis" que le había impuesto el papa Juan Pablo II.

"Es a través de Fidel Castro que el Espíritu Santo nos transmite el mensaje. Ese mensaje de Jesús, de la necesidad de luchar por establecer firme e irreversiblemente el reino de Dios en esta tierra, que es su alternativa al imperio", continuó.

Asimismo, el también expresidente de la Asamblea General de la ONU reveló que el levantamiento de su castigo ocurrió gracias al apoyo del nuncio apostólico en Nicaragua, Fortunatus Nwachukwu, quien le recomendó escribir una carta al papa Francisco para solicitar el cese de la suspensión.

El sacerdote reiteró que su alegría es poder dirigir su primera eucaristía en español, ya que a mediados del siglo pasado se hacía en latín y luego las realizó en inglés.

Durante los casi 30 años que duró su sanción, su trabajo como sacerdote fue limitado a confesar a desahuciados y funciones menores, indicó.

El pontífice dio su consentimiento para que se levante la "suspensión a divinis" que le impedía oficiar la misa a D'Escoto Brockmann, quien pertenece a la Congregación misionera Maryknoll.

El religioso fue suspendido por el fallecido papa Juan Pablo II en 1984, tras su entrada en el Gobierno sandinista de Nicaragua.

El papa Francisco aceptó la revocación de la "suspensión a divinis" y pidió al superior general de la congregación que siga con el proceso de reintegración del sacerdote nicaragüense.

Su primera misa tras el cese de la suspensión todavía no tiene fecha.

D'Escoto Brockmann anunció también que una película sobre su vida recién fue terminada de editar en Italia y que, posiblemente, se presente el 1 de octubre próximo.

"El nombre que le pusieron es 'The problem maker', 'El que le causa problemas al imperio'", dijo el sacerdote, entre risas.

Miguel D'Escoto Brockmann nació el 5 de febrero de 1933 en Los Ángeles (Estados Unidos), fue ordenado en Nueva York en 1961 y se convirtió en uno de los exponentes de la Teología de la Liberación.

Su colaboración con el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) de Nicaragua comenzó en 1975 a través del Comité de Solidaridad en Estados Unidos.

Al triunfar la revolución sandinista, D'Escoto fue llamado por la Junta de Reconstrucción Nacional para ser ministro de Exteriores.

Tras el regreso al poder de Ortega en enero de 2007, el religioso fue nombrado asesor para asuntos limítrofes y de relaciones internacionales.

Se nota lo arrepentido que estaba para solicitarle al Papa que le levantara la suspensión.

Visto en Secretum Meum Mihi, 05-Ago-2014.